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Es extraño. La vida es extraña. Los sueños son extraños.
Nuestra composición es extraña. El resto de seres vivos son extraños. La tecnología es extraña.
A veces, es extraño el destino. Muchos dicen que el triunfo llega si tienes suerte. Otros optan por afirmar que el triunfo llega a quienes lo buscan. Lo único que puedo decirte con precisión, es que todo es extraño.
Es extraño pensar en hechos del pasado, ponerte en la piel de quienes ya no están, sentir sus emociones e imaginar momentos que nunca podrás volver a vivir. Es extraño pensar que antes se clavaban lanzas en los cuellos para sentirse poderosos, cuando lo único que demostraban era cobardía y deshonor por su tierra. ¿Por qué quieren luchar, si no es por la Tierra? ¿Por un país, una parte de esa Tierra? ¿No es mejor luchar por toda ella, en su globalidad, y ayudarnos así todos? Es extraño.
Es extraño ver cosas tan simples y encontrar una solución tan difícil. La corrupción. Es extraña. Está ahí, la oímos, la vemos, la entendemos. La dejamos. Nos manejan como marionetas y, nosotros, solo hablamos. Pero no actuamos. Es extraño, cuando una revelación de toda la población acabaría con todos aquellos problemas.
Es extraño verme tecleando un portátil, rodeado de techo y paredes entre las que guardo toda la comida que necesito y más, y vestirme de ropa que, en su totalidad, suman más de cincuenta euros. Es extraño pensar que, a unos simples kilómetros, en este mismo planeta, hay millones de personas muriendo por falta de alimentos. Por guerras. Por enfermedades. No solo es extraño, sino que es difícil y doloroso hacerte la idea de cómo estarías en su lugar. Tanto, que nunca lo pensamos. Porque tenemos miedo. Y ese miedo, lo están viviendo mientras lees esto.
Es extraño. Nacemos siendo asesinos, aunque luego lo neguemos. La vida es asesina, es traidora. Nacemos porque otros millones de posibles nacimientos han muerto en el camino, sin darles la posibilidad de alcanzar su meta y ver la luz del sol. Ni siquiera han podido desarrollarse. Porque nosotros estábamos ahí. Es extraño. Los animales se comen entre ellos. Forma parte de la vida, es la cadena alimenticia, cuando el asesinato lo vemos como un delito.
Es extraño cómo la vida te abre camino. Dependiendo de cada uno de tus actos, te analiza y te otorga el paso más adecuado. A veces, llega el éxito. No sé cómo, es extraño pensar cómo algo que aparentemente no tiene cerebro pueda definir el trayecto de tu vida.
Es extraño cómo desperdiciamos los minutos de nuestra vida. Son muchos, pero no infinitos.
Es extraño ver cómo nos dejamos influenciar por nuestra cultura, nuestro alrededor, nuestros amigos. Las cosas normales son las que las personas aceptan por seguir las ideas de la mayoría. Las cosas anormales, son el resto. Las ideas que no están dentro del círculo de lo aceptado como "normal", no es aceptado correctamente por la sociedad.
Hasta que se hace. Una idea diferente. Una opción nueva en nuestras vidas que puede hacernos evolucionar. Lo extraño se hace popular, y se convierte en el centro de atención.
Es extraño. Es difícil. Es la vida. Y me encanta.
La poesía más profunda, es la que nadie entiende.
Porque es extraña. Es tu vida.
Emilio García
Nuestra composición es extraña. El resto de seres vivos son extraños. La tecnología es extraña.
A veces, es extraño el destino. Muchos dicen que el triunfo llega si tienes suerte. Otros optan por afirmar que el triunfo llega a quienes lo buscan. Lo único que puedo decirte con precisión, es que todo es extraño.
Es extraño pensar en hechos del pasado, ponerte en la piel de quienes ya no están, sentir sus emociones e imaginar momentos que nunca podrás volver a vivir. Es extraño pensar que antes se clavaban lanzas en los cuellos para sentirse poderosos, cuando lo único que demostraban era cobardía y deshonor por su tierra. ¿Por qué quieren luchar, si no es por la Tierra? ¿Por un país, una parte de esa Tierra? ¿No es mejor luchar por toda ella, en su globalidad, y ayudarnos así todos? Es extraño.
Es extraño ver cosas tan simples y encontrar una solución tan difícil. La corrupción. Es extraña. Está ahí, la oímos, la vemos, la entendemos. La dejamos. Nos manejan como marionetas y, nosotros, solo hablamos. Pero no actuamos. Es extraño, cuando una revelación de toda la población acabaría con todos aquellos problemas.
Es extraño verme tecleando un portátil, rodeado de techo y paredes entre las que guardo toda la comida que necesito y más, y vestirme de ropa que, en su totalidad, suman más de cincuenta euros. Es extraño pensar que, a unos simples kilómetros, en este mismo planeta, hay millones de personas muriendo por falta de alimentos. Por guerras. Por enfermedades. No solo es extraño, sino que es difícil y doloroso hacerte la idea de cómo estarías en su lugar. Tanto, que nunca lo pensamos. Porque tenemos miedo. Y ese miedo, lo están viviendo mientras lees esto.
Es extraño. Nacemos siendo asesinos, aunque luego lo neguemos. La vida es asesina, es traidora. Nacemos porque otros millones de posibles nacimientos han muerto en el camino, sin darles la posibilidad de alcanzar su meta y ver la luz del sol. Ni siquiera han podido desarrollarse. Porque nosotros estábamos ahí. Es extraño. Los animales se comen entre ellos. Forma parte de la vida, es la cadena alimenticia, cuando el asesinato lo vemos como un delito.
Es extraño cómo la vida te abre camino. Dependiendo de cada uno de tus actos, te analiza y te otorga el paso más adecuado. A veces, llega el éxito. No sé cómo, es extraño pensar cómo algo que aparentemente no tiene cerebro pueda definir el trayecto de tu vida.
Es extraño cómo desperdiciamos los minutos de nuestra vida. Son muchos, pero no infinitos.
Es extraño ver cómo nos dejamos influenciar por nuestra cultura, nuestro alrededor, nuestros amigos. Las cosas normales son las que las personas aceptan por seguir las ideas de la mayoría. Las cosas anormales, son el resto. Las ideas que no están dentro del círculo de lo aceptado como "normal", no es aceptado correctamente por la sociedad.
Hasta que se hace. Una idea diferente. Una opción nueva en nuestras vidas que puede hacernos evolucionar. Lo extraño se hace popular, y se convierte en el centro de atención.
Es extraño. Es difícil. Es la vida. Y me encanta.
La poesía más profunda, es la que nadie entiende.
Porque es extraña. Es tu vida.
Emilio García
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